La otra Salinas.

en la provincia de bolívar hay una pequeña población de menos de 10,000 habitantes llamada salinas. está ubicada a 3,500msnm y su paisaje es el de cualquier parroquia andina, con la diferencia que los campesinos de esta zona son los dueños de su propio destino a base de mecanismos comunitarios.

en 1971 salinas era un pueblo dominado por terratenientes, sin vías de acceso, sin agua potable ni energía eléctrica, con analfabetismo del 85% y mortalidad infantil del 45%. el infierno. a ese pueblo llegó el sacerdote antonio polo y un equipo de voluntarios que tras casi una década de alfabetización, catequización y capacitación en la producción de quesos de óptima calidad abrieron la primera tienda el salinerito en quito. la tienda era -y sigue siendo- de propiedad comunitaria. todos son dueños.

el apoyo económico de la cooperación técnica suiza y el trabajo mancomunado de los habitantes de la zona pronto dieron resultados: nuevos productos, utilidades que se reinvertían en la comunidad y exportaciones a la vista.

hoy, luego de 28 años de labor comunitaria no hay millonarios, pero la mortalidad infantil y el analfabetismo desaparecieron, llegaron todos los servicios básicos, los jóvenes van a las universidades y luego vuelven a trabajar por su comunidad, no hay desempleo ni delincuencia y el 80% de sus habitantes tienen casa propia.

fabián vargas, gerente de la cooperativa de producción y de la fábrica de quesos, sabe que podría tecnificar más su planta y prescindir de mano de obra, pero prefiere no hacerlo. "para nosotros es más importante la rentabilidad humana; preferimos un estilo más artesanal, lo cual no quita parámetros de calidad, eficiencia ni competitividad en el mercado", afirma.

en tiempos de pleitesía a los emprendimientos corporativos de lucro personal, refresca ver un camino igual de exitoso, pero solidario.

menos progreso, más desarrollo.

acabo de recordar que no hay queso en mi casa. iré por uno. será de el salinerito.

más información en http://www.salinerito.com