lunes, 22 de octubre de 2007

UN TRAPO CELESTE Y BLANCO.

como un trapo, así fue tratada la bandera de guayaquil, la gloriosa bandera que se enarboló el 9 de octubre de 1820 luego de haberse dado el mayor y más importante grito independentista de lo que ahora llamamos ecuador, la bandera que triunfó en pichincha.

la bandera de la independencia -y con ella toda la gloria que representa- fue ofendida por un puñado de ignorantes que no distinguieron entre la historia ancestral y la historieta reciente, entre próceres que forjaron la patria desde guayaquil y autoridades de hoy que discrepan en esta coyuntura.

la mayor ofensa, sin embargo, no fue la protagonizada por los manifestantes peninsulares, sino la desidia de las autoridades de la ciudad que tardaron mucho para rendir escuetos y tibios enunciados en defensa de la historia de la ciudad. ¡nada tardaron en reaccionar cuando ocurrió lo del puente! ¡nada tardaron en reaccionar -y con cuánta enjundia- cuando el presidente evitó ir a la sesión solemne de julio! ¡hasta respondía en versos el alcalde! ahora calla. callan. o hablan bajito, que es otra manera de callar.

de mi comentario no se salvan los concejales, el prefecto, los medios de comunicación, las cámaras de la producción, la junta cívica, etc., todos ellos frecuentes publicadores de páginas enteras en los periódicos cuando se trata de defender sus intereses económicos o políticos. lo de ahora era un tema de honor, no más.

ni siquiera la reacción del gobernador y del presidente de la república -tardía y carente de la fuerza con que arremetieron en otros momentos- se escapan de este apunte. aunque si cumplen con enjuiciar a los irrespetuosos y seguir la causa hasta lograr la sentencia correspondiente deberé escribir en favor de su entereza.

el propio vendedor de sueños también ha tardado en expresarse. para mí también caigan los palos. pero que nadie más -nunca más- ofenda la majestad de Guayaquil expresada en su bandera.

¿usted va a quedar sin expresarse?

2 comentarios:

  1. Estoy de acuerdo con el comentario del Vendedor de Sueños, creo que el hecho de ofender un Símbolo tan sagrado como la Bandera de Guayaquil es un delito que debe ser penado. Si por ofender al Presidente se pena con cárcel, como queda lo de nuestra Bandera?

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  2. yo tambien estoy totamente de acuerdo...!!!!! deberian de recibir un buen castigo por ofendr nuestra bandera!! tan lindaaa!!! eso ya se fue de una protesta a una vulgaridad y a una REEECONTRA QUE FALTA DE RESPETOO!!!en mi opinion guayaquil y lo que queda de guayas deberia de ser autonomo y evitarnos todo esto!!y la verdad que si el vendedro de sueños se ha demorado muchisisismo en poner este articulo! la verdad me parecio una estupidez que esa gente haya realizado ese acto en especial porque se han quedado hasta sin policia vigilantes etc porq ya no son parte de guayas y graciasa esto la delincuencia en santa elena ha subido provocando temor por parte de muchas personas... la verdad quepena por ellos...y por los que maltrataron la bandera..! que odio!!!

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