lunes, 19 de noviembre de 2007

DOS PÁJAROS DE UN TIRO.

si escribo "alucinante" me quedo corto. serrat y sabina llegaron a quito con las maletas llenas de versos y se las llevaron llenas de aplausos y de "bravos". el concierto que brindaron el pasado sábado 17 fue una amalgama de poesía, humor, canción, romanticismo, izquierda y pasión expresados en 2.5 horas de euforia.
entre otros encantos, los diálogos entre los dos maestros fueron -muchos de ellos- en verso, dejándole espacio a muy pertinentes menciones sobre el panecillo, jj y osvaldo guayasamín, ¡todo un lujo!
en algún otro momento, sabina afirmó tener su corazón dividido entre el atletic de madrid y el barcelona... de guayaquil, con lo que el maestro se ganó algunos gritos y aplausos del vendedor de sueños y un puñado de barcelonistas presentes en el general rumiñahui.
fue la música, por supuesto, el plato fuerte: mediterráneo, penélope, lucía y cantares, entre las de serrat; amores que matan, princesa, y nos dieron las diez, entre las de sabina. en total fueron 31 canciones de las cuales algunas compartieron, otras no, unas cuantas modificaron, pero todas fueron disfrutadas con un público privilegiado que entonó los coros, lloró con los versos más sentidos y se agotó de tanto y tanto aplaudir a dos maestros de la canción entregados por completo en un show elaborado con pulcritud y ejecutado con naturalidad.
serrat desenfadado, sabina de bombín, serrat con el sombrero del pirata cojo, sabina cantando algunas estrofas de lucía, serrat y sabina bailando un vals, serrat y sabina enormes, magistrales, como en este vídeo que recomiendo: http://www.youtube.com/watch?v=GaXxECDQlnY
al final, esa extraña sensación de no querer ser el mismo que entró al coliseo. esa extraña sensación de un deja vu al revés.

3 comentarios:

  1. Incluso en estos tiempos
    veloces como un Cadillac sin frenos,
    todos los días tienen un minuto
    en que cierro los ojos y disfruto
    echándote de menos.

    Incluso en estos tiempos
    en los que soy feliz de otra manera,
    todos los días tienen ese instante
    en que me jugaría la primavera
    por tenerte delante.

    Incluso en estos tiempos
    de volver a reír con los amigos,
    todos los días tienen ese rato
    en el que respirar es un ingrato
    deber para conmigo.

    Y se iría el dolor mucho más lejos
    si no estuvieras dentro de mi alma,
    si no te parecieras al fantasma
    que vive en los espejos.

    Incluso en estos tiempos
    triviales como un baile de disfraces,
    todos los días tienen unas horas
    para gritar, al filo de la aurora,
    la falta que me haces.

    Incluso en estos tiempos
    de aprender a vivir sin esperarte,
    todos los días tengo recaídas
    y aunque quiera olvidar no se me olvida
    que no puedo olvidarte.

    .

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  2. Creo que al vendedor le ha salido una compradora! Diga algo

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  3. el vendedor de sueños también vende a crédito y a veces tiene malos pagadores...

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